Milton Hershey —sí, ese en el que Hershey que estás pensando—, comenzó su primer negocio de dulces en Filadelfia en 1876, y fracasó. Después, en Chicago y Nueva York volvió con la producción de caramelos, y nuevamente fracasó. De regreso en Filadelfia, volvió a intentarlo, y allí fundó su compañía de chocolates. Sería hasta 1900 cuando surgiría la primera barra de chocolate Hershey’s en Estados Unidos.
Durante todo el siglo XX, The Hershey’s Company, consolidó una empresa internacional que suma en su portafolio de marcas: Jolly Rancher, Reeses, Ice Breakers, Pelón Pelo Rico, Choco Yogo, Brookeside, y las líneas de barras, bites, kisses, bebidas y repostería de Hershey’s.
A partir de 2017, la compañía creció a doble dígito en valor de ventas, una tendencia sostenida resultado de su estrategia de destinar el 10% de sus ventas totales del año en publicidad, promoción y exhibición de sus productos.
Hershey’s, un apellido y una marca valiosa, y deliciosa.
