Inmediatamente después de su lanzamiento, la nueva marca gráfica de Verizon comenzó a ser comparado con el de Netflix. Ambas marcas ahora comparten un estilo tipográfico simple y sin gráficos auxiliares, con una fuerte presencia del color negro. Aunque los logotipos de ambas compañías son visualmente distintos, la tendencia hacia el minimalismo y la simplicidad es evidente.
Los expertos en branding y diseño han tenido reacciones mixtas ante el nuevo logo de Verizon. Algunos elogian la modernización y la claridad del diseño, señalando que refleja una tendencia creciente hacia la simplicidad y la funcionalidad en el diseño de logos. Otros, sin embargo, critican la falta de originalidad y la posible confusión entre las marcas, dado el parecido estilístico con el logo de Netflix.